Termitas

Las termitas subterráneas no viven en la madera que están atacando. Las termitas viven en termiteros subterráneos, bajo el subsuelo y van y vienen desde su colonia hasta la fuente de alimento. Un termitero subterráneo es muy difícil de localizar.

Las termitas con alas o voladoras son las que asumen la función de crear nuevas colonias de termitas. No comen madera. Suelen advertirnos de que hay un problema de termitas en casa ya que salen volando en gran número. Los vuelos de las termitas aladas suelen ser en los meses de Abril y Mayo, coincidiendo con días de lluvia. Pueden confundirse con hormigas voladoras o con alas.

Las termitas tienen el aspecto más parecido a una hormiga, pero son de color rubio miel, con tonos más claros u oscuros (según el tipo de madera que estén ingiriendo). Son como granos de arroz con patas y antenas.

La cutícula de las termitas es endeble, existiendo diferencias de esclerotización dependiendo de los tipos o castas. Así, las larvas de termitas son  más débiles, pasando después a obreras y soldados, algo más resistentes en sus estadios adultos. Los soldados adultos si tienen la cabeza muy esclerotizada y de color más amarillento, especialmente las mandíbulas.

Las termitas miden entre 3,5 mm. en estadios jóvenes (larvitas), unos 6 mm. las termitas obreras y unos 7 mm. los reproductores secundarios. Las termitas soldado tienen un tamaño de unos 8-9 mm, los progenitores alados entre 10 y 12 mm. y la termita reina que puede llegar a medir en su clímax de reproducción y de hipertrofia a proporciones descomunales.

Las termitas obreras son insectos estériles, pudiendo haber machos y hembras, pero el aparato sexual reproductor se atrofió en sus primeros estadios larvarios. 

No ven por no tener ojos y realizan sus movimientos con los sentidos del tacto, olfativo y a través del funcionamiento de su par de antenas.

Es en las termitas obreras donde se observa, en el abdomen algo más rechoncho, la comida en los divertículos rectales, dando un viraje de color en esa zona, que depende de las pigmentaciones de colorantes según el tipo de madera ingerido y microorganismos colaboradores de su proceso digestivo.

Las termitas soldado se diferencian de las termitas obreras en que son algo más grandes y fuertes y su cabeza está mucho más desarrollada y esclerotizada. También tienen unas  prominentes mandíbulas, aptas para repeler o destruir a intrusos (hormigas, lombrices, larvas de insectos y artrópodos en general) que invadan su termitero.

Los machos realizan una serie de movimientos rápidos, como un "retranqueo", movilizando todo su cuerpo rápidamente varias veces por segundo. De esta forma emiten señales de peligro o alarma.

El personal técnico que realiza los tratamientos contra termitas en la madera, debe tener su correspondiente título de aplicador y formación para uso de biocidas de tipo 8 (TP8 protectores de la madera).

Este certificado para aplicador de biocidas en maderas, capacita para realizar tratamientos en madera en los que se utilicen biocidas que no estén clasificados como muy tóxicos, ni sean o generen gases.

Se pueden utilizar productos anti termitas de uso profesional que estén registrados en la Dirección General de Salud Pública. Estos productos anti termitas de uso profesional ofrecen la máxima persistencia y por lo tanto una mayor garantía de tratamiento. 

Los productos anti termitas que se utilicen en un tratamiento contra termitas, se consignarán en un parte de trabajo, donde quedará reflejado su Nº de Registro, plazo de seguridad, método de aplicación, dosificación y consumo.