Bajo estas condiciones, y más en concreto en regiones cálidas como pueden ser Alicante, Valencia y Murcia, no solo presentan un peligro por ser portadoras de enfermedades infecciosas: cada vez más, los insectos y roedores son portadores de microorganismos que ellos mismos transportan.
Muchas plagas, en su búsqueda de alimento y agua, se mueven entre la basura (el caldo de cultivo ideal para una amplia variedad de microorganismos no deseados). Pero cuando estas se acercan a la cocina de nuestro hogar o restaurante, a un almacén de alimentos o a una clínica, propagan patógenos (bacterias, virus, hongos y otros organismos infecciosos). Es por esto que las plagas, cuando conviven entre nosotros, presentan un gran riesgo para la salud.